Cuerpos extraños gástricos: ¿Son útiles los espárragos?

Introducción

Los cuerpos extraños son objetos o sustancias no nutritivas que ingieren los animales de manera accidental o deliberada y que pueden ser peligrosos por producir obstrucciones o perforaciones del tubo digestivo, por lo que, si se sospecha de la ingestión de un cuerpo extraño, se debe intentar extraer para evitar complicaciones.

Uno de los “remedios” más populares para facilitar el paso de los cuerpos extraños por el tubo digestivo, son los espárragos. Aunque dar espárragos sea muy popular, siendo incluso recomendado por algunos veterinarios, no existe ninguna evidencia científica sobre su efectividad y, sin embargo, sí están documentados casos clínicos en los que la fibra vegetal ha provocado obstrucciones intestinales. Por otro lado, los alimentos fibrosos como los espárragos, dificultan enormemente la localización y extración endoscópica de los cuerpos extraños.

Presentamos un caso clínico que instruye sobre las dificultades con las que nos encontramos en el que los propietarios dieron espárragos a su perro para facilitar el paso de unas piedras.

Presentación del caso

Los propietarios de un perro de raza Rottweiler de 13 años y 54 kg son testigos de la ingestión por parte de su animal de varias piedras. En un primer momento no le dieron importancia, pero al día siguiente, dado el número de piedras ingeridas, decidieron acudir a su veterinario a pesar de que el animal no presentaba ninguna sintomatología.

En el veterinario habitual se le realizó una radiografía confirmándose la presencia de seis piedras, dos de ellas se encuentran localizadas en el estómago y las cuatro restantes ya han pasado al intestino. Su veterinario recomienda dar espárragos al animal para facilitar el transito intestinal de los cuerpos extraños.

Radiografía piedras en aparato digestivo
.

Radiografía inicial

Al día siguiente el propietario constata que las cuatro piedras intestinales habían sido defecadas, pero las dos piedras gástricas continuaban en el estómago.

Piedras en el estómago
.

Rx realizada 48 horas después de la ingestión de las piedras

Debido al riesgo de que las piedras pasasen al intestino y provocasen una obstrucción, se recomienda la realización de una endoscopia para la extracción.

Los propietarios, a pesar de que el animal no estaba en ayunas y le habían dado abundantes espárragos, deciden hacer la endoscopia con carácter urgente.

Endoscopia de urgencia

Inmediatamente antes de la realización de la endoscopia, se realiza una radiografía en la que se constata la presencia de dos cuerpos extraños radiopacos localizados en el estómago.

Tras la sedación, inducción anestésica e intubación del animal, una vez alcanzado el perfil anestésico adecuado, se procede a la realización de la endoscopia.

La apariencia endoscópica del esófago es normal. El estómago está completamente lleno de alimento y restos de espárragos, lo que dificulta la localización de los cuerpos extraños. En el duodeno se aprecia un aumento de la granulación.

Tras dos horas de endoscopia, sin ser posible la extracción de los cuerpos extraños, se decide despertar al animal y posponer la endoscopia 12 horas.

Endoscopia programada

La radiografía, realizada previa a la endoscopia, nos volvió a confirmar la presencia de las piedras en el estómago.

A pesar de haber instaurado un periodo de 12 horas de ayunas aún se ve abundante contenido vegetal en el antro pilórico que dificulta enormemente la localización de los cuerpos extraños.

Con gran dificultad, se logra localizar y extraer la piedra de menor tamaño. La piedra de mayor tamaño, aunque se puede atrapar, no es posible lograr que pase por el cardias.

Ante la imposibilidad de la extracción de la piedra de mayor tamaño, se recomienda observar la evolución del paciente y, en el caso de aparecer síntomas relacionados con una obstrucción intestinal, proceder a la extracción quirúrgica de la piedra.

Evolución

Se realizó un seguimiento del paciente durante tres semanas después de la endoscopia sin presentar ninguna sintomatología.

Discusión

Los perros y gatos ingieren cuerpos extraños por distintos motivos, muchos de ellos son defecados sin que los propietarios sean conscientes de la ingestión ya que el tubo digestivo tiene una gran capacidad de eliminar cuerpos extraños. En el caso que presentamos, el animal fue capaz de defecar sin problemas cuatro de las seis piedras que había ingerido. Sin embargo, si tenemos constancia de que nuestra mascota ha ingerido un cuerpo extraño, es conveniente contactar con un veterinario especialista en digestivo que nos dé indicaciones de cómo actuar.

La inducción del vómito con agua oxigenada diluida o apomorfina puede ser efectiva para la recuperación de algunos tipos de cuerpos extraños como prendas de ropa. Sin embargo, no suele ser efectiva en objetos pesados como piedras. La inducción del vómito tiene riesgos asociados, por lo que es recomendable que la realice un veterinario cualificado que la realice de manera controlada y con sustancias seguras específicas que no causen daño adicional. No se debe hacer vomitar a los animales que han ingerido sustancias tóxicas irritantes o cuerpos extraños punzantes o cortantes como agujas.

La administración de espárragos u otro tipo de alimentos fibrosos para facilitar el paso de cuerpos extraños es una creencia muy extendida, sin embargo, no hay ninguna evidencia científica de que este tipo de alimentos tengan utilidad para este fin. Por otro lado, están documentados numerosos casos, en pacientes con enfermedades inflamatorias intestinales o diverticulosis, en los que los alimentos fibrosos han sido la causa de obstrucciones intestinales. De igual manera, se ha descrito la formación en el estómago de bolas de fibras vegetales (fitobezoares) que provocan obstrucciones gástricas. Por lo tanto, los alimentos fibrosos pueden ser más perjudiciales que beneficiosos en el caso de los cuerpos extraños.

La endoscopia es la mejor opción terapéutica para los cuerpos extraños esofágicos y gástricos por su alta efectividad y mínima invasión. Mas del 95% de los cuerpos extraños gástricos pueden ser recuperados por endoscopia, aunque es muy importante la valoración del caso.

Inmediatamente antes de la realización de la endoscopia es necesario realizar una radiografía que nos permita conocer la localización y el tamaño del cuerpo extraño. Algunos cuerpos extraños localizados inicialmente en el estómago pueden pasar al intestino donde ya no es posible la extración endoscópica. La media de los cuerpos extraños también es importante para determinar si la extración va a ser posible. Los cuerpos extraños no deformables de diámetro superior a 5 cm pueden dificultar la extracción.

Medición de las piedras ingeridas
.

Medida radiográfica del CE

Un cuerpo extraño que ha entrado en el estómago no debería dar problemas para poder extraerlo. Sin embargo, hay materiales que, en contacto con los jugos gástricos, aumentan de tamaño y pierden flexibilidad por lo que, aunque hayan entrado sin dificultad, tras un tiempo en el estómago no es posible su extracción.

Una piedra ni endurece ni aumenta de tamaño en el estómago, por lo tanto, igual que ha entrado debería haber salido. En el caso que presentamos, debido a la gran cantidad de espárragos que el animal tenía en el estómago, nos vimos obligados a realizar numerosas entradas y salidas con el endoscopio lo que produjo un aumento del tono del cardias que impidió el paso de la piedra de mayor tamaño. Probablemente si no hubieran sido necesarias tantas entradas y salidas del endoscopio la piedra hubiera podido salir.

De las piedras que estaban en el estómago la más peligrosa era la de menor tamaño, ya que si hubiera pasado al intestino podría haber provocado una obstrucción intestinal si el perro no la hubiera defecado. Es improbable que la piedra de mayor tamaño pueda pasar al intestino por este motivo, y habiendo recuperado la piedra de mayor peligrosidad, se decidió instaurar una observación del animal.

Otro aspecto interesante a discutir en este caso es hasta qué punto era urgente la realización de la endoscopia. El animal, tras la ingestión de las piedras, se encontraba completamente asintomático y solo el hecho de haber sido testigos de la ingestión los llevo a solicitar la atención veterinaria. El propietario nos comentó que la piedra grande la podía llevar en el estómago meses. Se solicitó la endoscopia urgente por miedo a que la piedra de menor tamaño pase al intestino. Si la piedra hubiese pasado al intestino podría haber sido defecada, como las otras cuatro, o haber producido una obstrucción intestinal. El desconocimiento de la presencia de un cuerpo extraño intestinal puede retrasar el diagnóstico y complicar el tratamiento, ser conscientes de su presencia nos permite actuar adecuadamente. En este caso se sabia de la presencia de las piedras, por lo que, si hubieran aparecido signos de obstrucción intestinal, habría estado justificada la atención urgente. En este caso, un animal asintomático, que no está en ayunas y al que se le han dado abundantes espárragos hubiera sido más adecuado instaurar un periodo de 24 horas o más de ayunas para facilitar la realización de la endoscopia. La presencia de alimento y espárragos en el estomago dificultó la realización de la endoscopia y fue, al menos en parte, la causa del fracaso de la extracción de la piedra de mayor tamaño.

Tras un seguimiento de dos semanas la piedra no está ocasionando problemas al animal. Solamente si aparecieran síntomas relacionados con la ingestión de la piedra sería necesario actuar. Probablemente, lo más adecuado sería intentar extraer la piedra de nuevo por endoscopia con el animal en ayunas y, sólo si fracasa la extración endoscópica, recurrir a la cirugía.

Conclusiones

No hay ninguna evidencia científica de que los espárragos, ni ningún otro alimento fibroso, tengan propiedades específicas para ayudar a pasar cuerpos extraños en el tracto gastrointestinal. Además, los alimentos fibrosos dificultan o impiden la extracción endoscópica de los cuerpos extraños, por lo que no recomendamos dar alientos fibrosos para favorecer el paso de los cuerpos extraños.